Los colores que apreciamos como un arcoíris, además de ser un fenómeno de la naturaleza, forma parte de la percepción del ojo humano. Estos se forman por una paleta de colores, que nunca varía, la cual se junta de forma cromáticamente ordenada, primero el rojo, luego el naranja, amarillo, verde, azul claro o cian, añil y violeta. Estos suelen aparecer en días ligeramente nublados, donde aún se alcanza a ver el cielo azul y los rayos del sol inciden en la humedad que hay en el ambiente.
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¿Cómo se forman los colores del arcoíris?
La manera más sencilla de definir un arcoíris es como un arco de colores que se divisa en el cielo, gracias a la incidencia del sol en las gotas de agua. Estas tienen que ser leves y el cielo no debe estar del todo cubierto por nubes, para así dar paso al sol y que podamos ver toda esta formación de colores. En el momento en que uno de los rayos traspasa una gota, esta lo desvía, haciendo que cambie de movimiento y que se convierta en uno de estos colores. Cada gota adquiere un color y en medio del refractado, se unen con sus similares para así dar con este arco uniforme.
Influencia del espectro visual humano
Cada uno es esos colores no son coincidencia, lo vemos así porque son los colores que nuestro ojo puede asimilar. Ya que nosotros tenemos un espectro visual distinto al de otros seres vivos, gracias a la luz que incide sobre los objetos, es que podemos ver colores. Asimismo, la composición de cada objeto hará que la luz refleje uno u otro color ¿Cómo funciona esto exactamente? Lo que percibimos no es exactamente del color que se refleja en nuestros ojos, esto es porque la incidencia de la luz es blanca y cuando esta cae sobre un objeto este, además de iluminarse, absorbe parte de la misma, lo que queda después de este proceso es lo que vemos.
Algunos objetos que vemos de color negro es porque su composición tiene la capacidad de absorber mayor radiación electromagnética de lo que nosotros podemos percibir. Por otro lado, los que vemos en blanco, tienen una carga de colores básicos como rojo, verde y azul. Todo esto basado en el espectro visible del ojo humano, que es como un campo que abre paso a una serie de colores y sus respectivas combinaciones, también conocido como luz visible y es que sin la luz, no es posible tener esta percepción.
Otros datos curiosos sobre los colores del arcoíris
Antiguamente, se le atribuían causas sagradas o misteriosas a los arcoíris, su aparición no era de temer, seguramente por sus llamativos colores a este no se le agregó ninguna razón supersticiosa terrible. Más allá de creer que era un regalo de Dios, plasmado en el antiguo Testamento, con su llegada luego del Diluvio Universal.
- Para los griegos, era una Diosa destinada a enviar mensajes entre el cielo y la tierra.
- Isaac Newton es quien habla en primer lugar sobre la teoría del color, donde un prisma atravesado por los rayos del sol reflejaba justamente los colores que vemos en el arcoíris.
- Algunas veces, ocurren arcoíris dobles, este fenómeno funciona como un espejo, pues el segundo es una versión invertida. El proceso es como el de un arcoíris habitual, el rayo de sol penetra la gota, pero se devuelve al menos dos veces, entonces los rayos se cruzan, apareciendo este segundo arco invertido y con menos intensidad en los colores.
